1. Todo empieza a ir lento
Si empiezas a observar que todos los procesos van cada vez más lentos y empiezas a desesperarte.
2. Hace cosas raras o se apaga
Si efectivamente tu móvil empieza a hacer ‘cosas raras’ -cierra aplicaciones sin que tú se lo ordenes o incluso se apaga solo- lo más probable es que tengas tanta basura ahí dentro que necesites hacer una limpieza a fondo.
3. Problemas con la batería
Si crees que tu batería está sufriendo más de la cuenta, antes de gastarte un dinero en cambiarla prueba a formatear el móvil.
4. Apps que van y vienen
Es probable que muchas de ellas hayan dejado algún tipo de rastro que esté perjudicando el funcionamiento del teléfono.
5. Te has quedado sin espacio
Después de tanto tiempo, es muy probable que muchos archivos eliminados hayan ido dejando un rastro que, de un modo u otro, estén ayudando a petar aún más la capacidad del teléfono. Si vuelves al estado de fábrica seguramente acabes liberando bastante espacio sin saberlo.